¿Qué nos enseña India sobre la Protección a la Neutralidad de la Red?
La historia de neutralidad de la red en India es emblemática para comprender los impactos y desafíos relacionados a este principio en la era digital. En 2018, el país implementó una de las regulaciones más estrictas del mundo a favor de la neutralidad de la red, prohibiendo que proveedores de internet discriminaran o privilegiaran determinados contenidos online. Este marco representó una victoria significativa para activistas y consumidores. Sin embargo, sigue la misma cuestión: ¿cómo la experiencia indiana evolucionó desde entonces?
Los esfuerzos para proteger la neutralidad de la red en India fueron liderados por el movimiento "Save the Internet", impulsado por organizaciones de la sociedad civil y consumidores. La regulación aseguró que se trataran igualmente a todas las formas de datos en internet, promoviendo un entorno digital abierto e inclusivo. Este avance fue esencial para la innovación y el acceso equitativo a la información.
A pesar de la legislación sólida, su implementación enfrenta desafíos continuos. Proveedores de servicios de telecomunicaciones (TSPs) han presionado por cambios reguladores que les otorguen más control sobre el tráfico y los precios. Frecuentemente se utilizan argumentos como la necesidad de “reglas iguales para los mismos servicios” y preocupaciones relacionadas con la viabilidad económica para justificar estos cambios.
Desde la implementación de la neutralidad de red, el uso de internet en India ha crecido exponencialmente. Los costos de datos han disminuído drásticamente, mientras que el consumo promedio por usuario aumentó de 89MB en 2015 para más de 21GB en 2023. Estas cifras señalan que, además de no frenar el desarrollo económico, la neutralidad de la red también lo impulsa, al promover una competencia justa y ampliar el acceso a servicios digitales.
Aún así, empresas de telecomunicaciones afirman que la neutralidad de la red compromete su capacidad de recuperar inversiones en infraestructura. Algunos defienden la implementación de tarifas para servicios OTT (over-the-top), argumentando que las plataformas se benefician desproporcionadamente del ecosistema sin contribuir directamente a su mantenimiento.
A pesar de los avances, aún hay riesgo de retroceso. Propuestas que debilitan la neutralidad de la red, como las tarifas diferenciadas ( “Fair Share”) para proveedores de contenido, siguen surgiendo periódicamente. Este tipo de política puede segmentar el internet, favoreciendo a los grandes players que pueden asumir los costos, restringiendo la innovación, perjudicando los pequeños negocios y startups, además de aumentar los costos para el usuario final.
La experiencia de India señala la importancia de regulaciones claras y de la movilización social para preservar la neutralidad de la red. Para países como Brasil, donde están en curso debates semejantes sobre los “peajes en internet”, India ofrece lecciones valiosas: la neutralidad de la red no es solo una cuestión técnica, sino un principio esencial para garantizar un entorno digital democratico y accesible a todos, promover la innovación y fortalecer el ecosistema digital.